Reporte de lectura
Denis Hernández Baltazar.
LA REALIDAD DE LA
SOCIEDAD ACTUAL
La Sociedad es conjunto de personas que se
relacionan entre sí, de acuerdo a unas determinadas reglas de organización
jurídicas, ya que comparten una misma cultura o civilización en un espacio o un
tiempo determinados.
Hay 4 ideas
principales que definen el modelo clásico en la sociedad:
a) La primera es que el orden social
es producido creado, y no transmitido o subordinado a un orden superior;
afirmación que implica la ruptura con el orden religioso.
La sociedad es una creación de la
voluntad política. El cual las primeras naciones modernas, fueron Holanda y los
Países Bajos, Gran Bretaña, los Estados Unidos y Francia, nacieron de
revoluciones.
b) La sociedad y su interés se vuelven así
principio adecuado para la valoración moral de los comportamientos. Bien y mal
ya no son definidos por una tradición o por un mensaje divino, sino por los
efectos positivos o negativos de los comportamientos sobre el interés general,
vale decir, sobre el funcionamiento del cuerpo social.
c) Este modelo clásico de
sociedad produce individuos similares pero no iguales; se contrapone directamente
con el modelo que asocia igualdad y diferencia, cuyas condiciones de existencia
intento investigar aquí. Los hombres nacen y permanecen libres e iguales en sus
derechos”.
La igualdad de los derechos
civiles es así fácilmente combinada con la desigualdad de las situaciones
sociales, con una fuerte dominación de clase, con la reducción a la esclavitud
o la aniquilación de los colonizados y con el ejercicio de un poder sobre la
mujer hasta el punto de negarles durante largo los derechos civiles se han transformado
paulatinamente en derechos sociales y la desigualdad se ha reducido en virtud
de los impuestos y de las políticas sociales de redistribución.
d) Cabe agregar que el llamado a
la igualdad entre el desarrollo de las fuerzas productivas y la igualdad de
derecho contra la desigualdad de hecho no habría adquirido la fuerza que
históricamente tuvo si no se hubiese basado sobre una confianza absoluta en el
sentido de una evolución histórica natural. Cuanto más moderna es una sociedad,
más rápido se transforma y actúa en profundidad sobre si misma demoliendo las
barreras y las distancias sociales heredadas.
EL ESPACIO SOCIAL
En un primer momento, la
sociología se presenta como una topología social. Se puede representar así al
mundo social en forma de espacio (de varias dimensiones) construido obre la
base de principios de diferenciación o distribución constituidos por el
conjunto de las propiedades que actúan en el universo social en cuestión, es
decir, las propiedades capaces de conferir a quien las posea con fuerza, poder,
en ese universo.
La posición de un agente
determinado en el espacio social puede definirse entonces por la posición que
ocupa en los diferentes campos, es decir, en la distribución de los poderes que
actúan en cada uno de ellos; estos poderes son ante todo el capital económico
—en sus diversas especies—, el capital cultural y el social, así como el
capital simbólico, comúnmente llamado prestigio, reputación, renombre,
etcétera, que es la forma percibida y reconocida como legitima de estas
diferentes especies de capital.
El campo social se puede
describir como un espacio pluridimensional de posiciones tal que toda posición
actual puede ser definida en función de un sistema pluridimensional de
coordenadas, cuyos valores corresponden a los de las diferente variables
pertinentes: los agentes se distribuyen, según el volumen global del capital
que poseen y, en una segunda, según la composición de su capital; es decir,
según el peso relativo de las diferentes especies en el conjunto de sus
posesiones.
El mundo social se puede decir y construir de
diferentes maneras: puede ser prácticamente percibido, enunciado, construido de
acuerdo con diferentes principios de visión y de división —por ejemplo,
divisiones étnicas— siempre quedando claro que las uniones fundadas en la
estructura del espacio construido sobre la base de la distribución del capital
tienen mayores probabilidades de estabilidad y durabilidad así como que las
otras formas de agrupación se verán siempre amenazadas por las escisiones y
oposiciones vinculadas a las distancias en el espacio social.
El espacio social y las diferencias que en él
se trazan "espontáneamente" tienden a funcionar simbólicamente se caracterizados
por estilos de vida diferentes. No podemos hacer una ciencia de las
clasificaciones sin hacer una ciencia de la lucha de las clasificaciones ni sin
tener en cuenta la posición que en esa lucha por el poder de conocimiento, por
el poder mediante el conocimiento, por el monopolio de la violencia simbólica
legítima, ocupa cada uno de los agentes o grupos de agentes comprometidos, sean
simples particulares dedicados a los azares de la lucha simbólica cotidiana o» bien
los profesionales autorizados (y a tiempo completo), entre quienes se
encuentran todos los que hablan o escriben acerca de las clases sociales y que
se distinguen según sus clasificaciones involucren en mayor o menor grado al
Estado, detentador del monopolio de la nominación oficial, de la clasificación
correcta, del buen orden.
El mundo social es en gran parte
algo que hacen los agentes, a cada momento; pero sólo pueden deshacerlo o
rehacerlo sobre la base de un conocimiento realista de lo que este mundo es y
de lo que ellos pueden hacer en función de la posición que en él ocupan.
En otras palabras, la delimitación
objetiva de clases construidas, es decir de regiones del espacio construido de
las posiciones, permite comprender el principio y la eficacia de las
estrategias clasificatorias con que los agentes aspiran a conservar o a
modificaren ese espacio, y los puntos de vista sobre ese espacio mismo la
constitución de grupos organizados para la defensa de los intereses de sus
miembros.
La sociedad también se le denomina como un
instituto organizado. El poder simbólico de los agentes como poder de hacer ver
y de hacer creer de producir.
Los marxista designa como "la conciencia
del exterior", es decir, la contribución que ciertos intelectuales aportan
a la producción y difusión, en particular en dirección de los dominados, de una
visión del mundo social que rompe con la visión dominante, sólo se puede
comprender sociológicamente si se toma en cuenta la homología entre la posición
dominada de los productores de bienes culturales en el campo del poder.
Definir la posición social solamente por referencia a
la posición en las relaciones de
producción económica y cultural: Se construye así un mundo social
unidimensional, organizado simplemente en torno a la oposición entre dos
bloques.
En realidad, el espacio social es
un espacio pluridimensional, un conjunto abierto de campos relativamente
autónomos, es decir, más o menos fuerte y directamente subordinados, en su
funcionamiento y sus transformaciones, al campo de la producción económica: en
el interior de cada uno de los sub espacios, los ocupantes de las posiciones
dominantes y los de las posiciones dominadas se comprometen constantemente en
luchas de diferentes formas.
Las tomas de posición políticas
en un momento dado (por ejemplo, los resultados electorales) son el producto de
un encuentro entre una oferta política de opiniones políticas objetivadas
(programas, plataformas de partidos, declaraciones, etcétera) ligada a toda la
historia anterior del campo de producción, con una demanda política, en
relación a su vez ligada con la historia de las relaciones entre oferta y
demanda.
La Sociedad Contemporánea.
En las sociedades tecnológicas
existe actualmente un acuerdo casi absoluto sobre el futuro de la libertad. La
máxima opción individual es considerada como el ideal democrático. Nos ofrecen
un oscuro panorama del futuro donde las personas aparecen como
criaturas-consumidoras casi mecánicas, rodeadas de artículos estándar.
En cambio, hoy, «el ser humano ha
dejado de ser, en todos los aspectos, agente de elección». Y refiriéndose al
futuro, declara: En el futuro, el hombre se verá ostensiblemente reducido al papel
de un aparato de grabación. Privado de opción, será un sujeto pasivo, no activo.
La ciencia y la tecnología han
fomentado la estandarización. La ciencia y la tecnología avanzarán, haciendo
que el futuro sea aún más estándar que el presente. El hombre perderá
progresivamente su libertad de elección.